Inventario

El deseo (supongo que igual que el de todos, o al menos la mayoría) es que la vida vaya bien y, de una forma u otra, una se las arregla para procurar que así sea. Cada cosa que hacemos, desde la más insignificante, hasta la más cabrona, la hacemos buscando nuestro bienestar, vía la gestión de alegrías y el combate a los problemas.

Este año ha sido bastante extraño, por decir lo menos. Comenzó igual que todos. Con las mismas certidumbres y las mismas dudas, empujada por la inercia de lo que había venido haciendo desde ¿Qué? ¿2003? Después de muchos años ininterrumpidos en estas ondas de la prostitución, se había esto ya convertido no en mi trabajo, sino en toda mi forma de vida. No hay nada más peligroso para la imaginación (y para la alegría) que la rutina.

Por eso me di un respiro. Uno de esos que llaman sabático. Me ha servido. Digo, las cosas en lo que cabe están bien, no muy diferentes al menos a como seguramente están en todos lados: crisis, mucho calor, influenzas y tiempos de elecciones por todos lados (la política apesta), pero en general, la gente nos la arreglamos para estar por encima de todo eso.

Estoy contenta y cada vez más lista para volver a trabajar. Todavía quiero tomarme un tiempecito más de respiro, pero ya pronto volveré a vestir el uniforme (minifalda y tacón alto)…

Por ahora las cosas marchan bien, si hago inventario de lo bueno en estos meses de descanso, hay motivos para dibujar una sonrisa:

- Estrené galán (D), con quien ando sin compromisos mayores ni promesas de sortija ni banquete

- Estoy de nuevo en el ruedo con algunos clientes selectos de antaño (para no quedar en quiebra ni perder el ritmo).

-He tenido mucho tiempo para mí

-He podido acercarme a la familia

Sé que dejé pendientes un chorro de puntos (de la b a la h) en una listade ideas sobre temas de los cuales pensaba escribir. Oops! Ay iré poniéndolos. Por lo pronto, recuerdo que el que más había llamado la atención era aquel en el que anunciaba que mi negocio comenzaba a convertirse en oficio de familia… ya de eso sabrán quienes hoy compraron Metro. Quienes no, pues comprenlo ja, ja, ja...

Bueno, pues yo acá diciendo cosas. Les dejo un beso.