Desde el periódico: La crisis (reloaded)


Últimamente se ha puesto de moda la puta palabra “crisis”. Cada que prendes la tele, escuchas la radio, lees el periódico o conversas con alguien, es probable que este escabroso tema salga a colación como el fantasma ruin, que amenaza nuestros monederos. Lo peor es que para defendernos, no podemos sino desear que conforme las cosas se vayan poniendo más peliagudas, la providencia nos ayude a irla librando o al menos le echen pajita al chingadazo.

Creo que yo, como la mayoría de la gente, no sé a ciencia cierta qué diablos pasó ni por dónde fue que se chingó el asunto. Un día, de pronto, se anunció en los noticieros que había quebrado un gringo banco mierdero y al otro ya estaba el mundo entero en medio de una broncota tamaño rotoplás y con la reatota atorada desde el orgullo hasta las anginas. No sé si todo es culpa del gringo loco al que avientan zapatazos, si algo tiene que ver el gobierno del empleo o si cada quien hicimos o dejamos de hacer algo que nos jodió, pero la neta es que me preocupa. Tal vezx no bastó que mucha gente votara contra ese peligro para la nación que iba a hacer que nos acordaramos lo que significaba que un billete de veinte mañana valiera... ¿a cómo está hoy el dólar? ¡Qué importa! Basta con anunciar que el pedo viene de afuera, que es una crisis mundial, para que el mal de muchos termine por consolarnos. No creo que sirva de mucho que haya bajado por una temporada mi tarifa a $1,800.00 pero hay que estar a tono con los tiempos y poner cada quien su granito de arena ¿no?




Es curioso (insisto) que hace apenas unos años, pasaban en la tele comerciales diciendo que los niños de estos tiempos ya no sabían lo que significaba la palabra crisis. Insinuaban que si la escuchaban tendrían que ir a buscarla a un tumbaburros, como si fuera una de esas palabras raras que nadie usa. ¿De verdad creerían que no llegaría o nomás se hacían majes? Yo a veces siento que vivimos en un tablero gigantesco de Monopoly (o turista pa los más nacionalistas), donde el puto banco no deja de darle más y más lana al que va ganando. Habrpa quienes no vivieron la crisis y no saben lo que es, pero la verdad a mí sí me tocó entenderla y vivirla en carne propia.

Ya lo he contado en otras ocasiones, pero ahorita va muy a tono con el tema: Yo nací en una situación privilegiada. En mi casa no sólo nada faltaba, sino que nos acostumbraron a lujos y comodidades, que veríamos desaparecer de pronto, como efecto de una crisis que se vivió por allá de mediados de los noventa. Para cuando entró el siglo XXI, de la lana y propiedades que tenía la familia apenas quedaban unas cuantas cosas y muchos recuerdos. He dicho que jamás sabré si papá murió porque nos quedamos pobres, o si nos quedamos pobres porque papá murió, el caso es que conforme aquella crisis y las deudas que trajo consigo fueron llevándonos a la bancarrota, mi papito fue haciéndose chiquito, chiquito hasta que terminó por apagarse. Hay quien dice que lo mató un infarto, pero yo sé que todo aquello acabó por romperle el corazón.

Naturalmente, a partir de esa crisis mi vida dio tremendos giros y torceduras. Se dieron lugar una serie de acontecimientos que fueron llevando a otros y a otros, hasta que terminé por resolver mis emergencias inscribiéndome al gremio más antiguo del mundo. Cuando una chava tiene buena percha y poca lana, sobran las billeteras caritativas dispuestas a cambiar fondos por caricias. Fue cuestión de dejarle al tiempo convencerme, sin falsos prejuicios, de que era un camino digno y honesto para que nada faltara en mi refri, sin embargo, a veces me pregunto qué sería de mí hoy, si no hubiera tenido que vivir las consecuencias de aquella crisis. Es probable que habría terminado una carrera y, aunque seguramente sería bien locochona y calenturienta, lo más seguro es que lo haría por puro gusto y no como medio de llenar la alacena.

Por eso ahora, cuando alguien me habla de la crisis siento una punzada en la barriga y aunque, como dice Gloria Trevi, estoy dispuesta a salir a partirme la mandarina en gajos todos los días para tener con qué comprar la chuleta, la neta es que me da ñañaras saber que no depende sólo de mí el asunto de salir adelante.

En cualquier caso, creo que tenemos que ser fuertes para lo que se venga. Es chamba de todos estar preparados. Pensar que algo grande sucedió y está sucediendo allá, donde no podemos hacer nada. ¿Qué sabemos la mayoría de bolsas de valores, de rescates financieros o de todas esas palabras que se han puesto de moda? Sabemos de la bolsa del mandado y del rescate de nuestras quincenas. De eso tenemos que ocuparnos. Es hora de estar listos, hay que conocer al vecino, preocuparnos por lo que le pasa al otro. Estar al pendiente de que una chavita no tenga que vender las pompis por primera vez para ganarse unos pesos, que un papá no se muera de tristeza porque lo va perdiendo todo, o que una mamá tenga para alimentar a los suyos. En tiempos de crisis lo que puede salvarnos es estar unidos. Dar abrigo, alimento y calor a quien lo necesite. Pensar que nada sobra, cuando a alguien le falta. Sólo la esperanza vence los problemas grandes. Perdón si me puse cursi.

Un beso
Fernanda, siempre

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Una buena mamada

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Besos para todos

Besar es, sin duda, uno de los placeres más maravillosos que una persona pueda darse y, además, una muestra de que existe el amor o al menos la capacidad de gozar el regalo de la vida. En estos tiempos, cuando todos los días nos enteramos de que ya mataron a estos o aquellos, de que hay guerra en tal parte del mundo, discriminación en tal otra, de que acá en México hay secuestrados, decapitados y demás mierda ¡Qué rico que todavía hayamos gente con ganas de repartir besos! ¿No?

¿Qué pedo con los que en Guanajuato tuvieron la puntada de prohibirlos? Deberíamos organizar un gran certamen mundial de besuqueos. ¿Sede? Fácil: El callejón del beso ¿quién se apunta?

El video es un regalo para los que lo quieran prohibir...

¡Vivan los besos!

¿Quien pompo? fiestecita quién pompo...

Bueno, pues para que no le digan, que no le cuenten que la Fer nomás se anda quejando de la crisis y del mundo y no pone un granito de su parte, y como contra la carnicería en medio oriente no puedo hacer nada que sirva, contra la crisis y para que la cuesta de enero no le dé en la torre a las ganas de divertirse, les tengo una promoción que, la neta si es una ganga:

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¿Quién pompo?

Chale... y yo que creí que "La Crisis" nomás era el grupo que tocaba con Chico Ché


¡Caray! Ora cuando tenga chilpayates si tendré que enseñarles lo que a los del comercial les sufieron tantas veces... Bueno, lo bueno es que ahora cuando hablan de la "crisis" siempre le ponen el apellido "mundial" como si con eso le pusieran cremita...

Ni modo... dejarán de ser políticos ¿verdad?

Yo por eso pa'lotra mejor voto por mi firulais... "Crisis mundial"... la maaaaaaaaaaanga qué...

044 55 3503 5738

No es ninguna novedad que pierda celulates ¿verdad? Tengo nuevo teléfono, llámame es el
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Vamonos todos a la verga

Al norte de los Estados Unidos, por la región de los grandes lagos, hay un pueblecito que se precia de pintoresco, ideal para vivir el american dream y ser feliz en un paraíso de bosques, agua, frío cachondo y sonrisas gringas. Se llama Vergas, Minnesota. ¡Santo niño de Chalma! ¿Quién diablos es el encargado de bautizar pueblos? Para darle un aplauso por esta puntada.

Ora sí que casi me voy de nachas (sin albur) cuando el buen samaritano y narrador de adarga antigua, Don Julián -el Oliver- Iriarte, me envió un gentil correo con los datos de este singular condado. Ora sí que no sé si conoce de lleno el perfil de mis gustos turísticos o nomás me habló al tanteo, pero es que está para morirse de risa.

Me surgen muchas preguntas: ¿Cuál será el gentilicio de los habitantes de Vergas, Minessota? Si alguien de Aragón, es aragonés, ¿Los de Vergas son vergones? Los que viven allá ¿Se sentirán los muy Vergas?, Si un chavo besa a una señorita de ese pueblo ¿Se está llevando la verga a la boca? Doble problema: ¿Qué haces? Si te quedas parado todo el día en un pueblo con ese nombre, sería una proeza digna de infomercial con el capi Albures, pero si te sientas en Vergas y te gusta ¿Se te crea adicción? Si en el lago de Chapultepec nos gusta ver patos, en el de ellos ¿les gustará ver ganzos? Si a nosotros nos gusta ver llover, a ellos les ¿les gustá ver gotear? Se imaginan un mejor slogan publicitario para promover el turisomo femenino (y gay) que: Visítanos, ¡Hay Vergas para todos!

¡Caramba! Son tantas las preguntas… por lo pronto al fin puedo regalarles una imagen maravillosa, la foto de mis vergas:


Nota: Por si dudan de la existencia del pintoresco pueblecillo, acá les dejo la dirección de sus portales electrónicos: http://www.govergas.com/ y http://www.vergasmn.com/, chequen los datos turísticos, mapas y coordenadas, para que si un día los mandan para allá, sepan que vuelo tomar.

La tierra prometida

Debo admitir que muchos de nosotros no sabemos a pie juntillas cómo es la vida en medio oriente. A ciencia cierta resulta difícil incluso saber bien a bien cómo la pasan quienes viven en Chalco.

Es sabido que, desde Caín y Abel en esa zona del mundo se han agarrado a trancazos los unos contra los otros ininterrumpidamente. Es una historia de guerras que ya no distingue credos ni tiempos, pero que continúa como una constante. Habrá muchísimas cosas en las que yo no esté de acuerdo respecto al mundo árabe. Seguramente si yo allá viviera y llevara el estilo de vida que tengo ya habría muerto lapidada.

En cualquier caso ¿Qué importa? No soy demagoga porque no hago campaña por nada, solamente expreso que es desastroso ver lo que está pasando allá y es insoportable ver a un ejército de primera luchando contra civiles armados. No es difícil saber dónde habrá más víctimas.

Una vez vi una película en la que a la gente le pasaba eso, un ejercito la sometía y allí muchos morían, aplastados por la fuerza del otro, pero los que quedaban vivos tenían miedo, hambre, frío. Estaban enfermos, heridos y cada vez con menos esperanza. Cada escena me hacía temblar y aborrecer a los martirizadores. Especialmente cuando rompían a las familias y las llevaban a Auschwitz. La película es El Pianista. Hoy siento exactamente lo mismo por los palestinos.

Hace un año o dos, vi otra película. Se llamaba Las tortugas saben volar. Los actores eran niños de Iraq. Todos, víctimas reales de la guerra. Desnutridos, mutilados y enfermos todos se dedican a desenterrar minas antipersonales que les compran las milicias regulares. Una madre de 12 años, cuyo hijo es producto de una violación, se empeña en provocar la muerte “accidental” de su bebé. Es una película desesperada.
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No necesito vivir allá, para que me de asco el asesinato artero, la injusticia, la mierda. No puedo pensar que sólo porque algo ha pasado desde siempre entonces debe seguir pasando. Allá o en cualquier parte la guerra es un asco. Son responsables ambas partes, alguien ha lanzado cohetes a Israel, pero sólo una de las partes tiene la fuerza para aplastar a la otra.
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Ojala esto pare, pero en tanto, sé que hay temas más alegres... gracias a todos por sus opiniones.


Tal vez


Creo que todos, al menos alguna vez, hemos sentido simpatía por alguien débil frente a los abusos de un fuerte. Es normal que nos suba la sangre a la tatema cuando un grandulón le está partiendo la mandarina en gajos a un chiquito (sin albur), que mentemos madres cuando un gendarme está extorsionando a una doñita indígena para no dejarla vender sus lechuguitas en la calle, cuando un puto cavernícola y mal parido le propina a su mujer mandarriazos suficientes como para ponerla en el hospital, cuando un hijo de puta abusa sexualmente de un niño, cuando una maestra nomás por culera se trae en jabón a niño nomás por amargada o cuando cualquier otro gandaya se aprovecha de ser más grande, más fuerte, más cabrón o más poderoso que otro para partirle su madre. Simplemente cualquiera con un poco de corazón siente mucho coraje cuando se es testigo de un abuso.

Qué debe sentirse entonces cuando prendes la tele y ves que unos miserables con tanques, aviones, proyectiles y demás basura hacen pedazos a una ciudad apenas más grande que la delegación en que vivimos y habitada por seres humanos sin mayores recursos para defenderse que poner sus manos sobre sus cráneos para que el bolillazo duela menos. ¿Cómo se admite ver pistolas peleando contra resorteras? ¿Cómo se es indiferente a que el gobierno de Israel haya bombardeado una escuela de la ONU y asesine así sin vergüenza, ni justicia, ni arrepentimiento a hombres, mujeres, niños y ancianos que no deben sino el hecho de haber nacido en una tierra donde el odio es el pan diario?

¿No bastan las cicatrices horribles e incurables de lo que el pueblo de Israel vivió como resultado de un odio estúpido e irracional, como para que hoy ellos se comporten como nazis frente a otro pueblo inerme? ¿Qué sigue? ¿Guetos? ¿Concentración? ¿Exterminio?

Ojalá pudiéramos hacer algo más que desear que el terror termine y que, si tantas ganas se traen, sean los jefes de Hamas y de Israel quienes a trancazo limpio y sin balazos arreglen sus diferencias o hasta se desoyen vivos entre ellos sin aplastar la inocencia, mientras no podemos hacer más que decir que no estamos de acuerdo con un mundo así y seguir deseando. Tal vez deseando muchos y con mucha intensidad el sentido común le gane a la barbarie.

¡Viva la paz!

CHAT A LAS SIETE Y MEDIA

RETOMANDO, COMO DIRÍA EL BORRACHO, A ESO DE LAS SIETE Y MEDIA SE REANUDAN LOS CHATS DE LOS MIÉRCOLES, PERDONEN LA TARDANZA... ANDO EN LA CALLE.

http://xat.com/chat/room/31602853/

Contar

Dicen que una de las cosas más hermosas que puede hacerse en la vida es contar amigos. Una de las cosas que me ha permitido hacer este blog es contarlos muy a menudo, pero -como dice Benedetti- (el de los poemas, no el de las pizzas), no contarlos del uno al cinco ni mucho menos, sino contar con ellos, con ustedes.

Lo más padre, y lo que no dice Benedetti, es que la manera en la que comencé a contar con dichos amigos ha sido contando, pero contando cuentos, historias, locuras. Hace algunas semanas, quizá por las pachangas, por el descanso o por andar en tanta cosa, he dejado de escribir, como al principio, las cosas de mi vida, sin embargo, me encanta y me hace muy feliz entrar al blog y encontrar siempre comentarios afectuosos y tanto cariño, neta que muchas, muchas gracias por todo ello. Craneo, Blue, Fly, Aby, Kaos, Lilith, Panterita Rosa, Yarko, Espejito FranBar ( http://elespejodefernanda.blogspot.com/), Don Julian -Oliver- Iriarte, Maximus George, Unicornio, Lobito969, Trumpet, Edy, y demás amigas y amigos (que no olvido, solo que me fui de prisa)

Estoy en un periodo de "estreñimiento" cerebral, cuando menos en lo que a escribir cosas chocarreras para el foro se trata, sencillamente no se me ocurre qué escribir ni me ha pasado algo suficientemente interesante o cotorro como para compartirlo, a veces la vida simplemente pasa. Últimamente he estado recogida (que no es lo mismo que re-cogida), desnoviada y pensando en la inmortalidad del cangrejo (especialmente porque en la playita había muchos de esos y ninguno era inmortal). Claro, podría contar un poco de lo que me pasó en la fiesta de fin de año y el tacote que me eché, pero eso ya está enviado para publicarse en Metro y, pos no ¿verdad? Hay que leerlo allá.

No sé, quizá si un buen samaritano me contrata para una cita, la pasamos chido y me ayuda a fabricar material pa' ponerle a esto la sal, el chile y el limón que lo hacen divertido... Después de todo hay que seguir chambeando, tanto para vivir como para tener más locuras que contar ¿no?

Besos