*AVALO EL POST ESCRITO EN EL FORO SEXYMX BAJO EL SEUDÓNIMO FERNANDASIEMPRE
Durante los primeros días no dejaba de reír. No podía creer que llevaba tres años anunciando mis servicios por internet y no me había dado cuenta cabal de la existencia de los foros. Fue como el descubrimiento de la minifalda para una prostituta a gogó. Creo que hay lugares hechos para cierta gente y gente hecha para ciertos lugares. Yo no estoy segura de que los foros se hayan hecho para mí, pero en mayo de 2006 estaba segura de que yo estaba hecha para ser forista.
¿Alguien puede imaginarse un lugar en el que un titipuchal de calenturientos y una que otra colega se la pasen las 24 horas de cada uno de los 365 días del año hablando de sexo o, para ser específicos, contando historias de prostitución y otros demonios? O sea ¡mi mero mole!
Era un mundillo interesante, habitado principalmente por hombres, entre clientes y curiosos, que durante todo el día se la pasaban narrando, de la manera más cachonda posible, sus aventuras sexuales con cada una de las prostis que nos anunciábamos en las páginas.
En el foro se cuentan las historias de tal forma, que convierten un “palenque” normal en la crónica del mejor palenque de la feria de San Marcos con Joan Sebastian, el Buki y hasta Ninel Conde en pelotas haciéndoles los coros. O sea, se avientan cuentos tan bien contados que hacen que ese lugar se vuelva como el Disneylandia de los chaqueteros.
Es una lista interminable de crónicas en las que se narra, con lujo de detalles, la forma en que los clientes le han hecho el amor a verdaderos forros de viejas. En el portal, hay fotos súper sexys de unas ochenta chavas guapísimas que vendemos ratitos de placer y en el foro hay narraciones sobre cómo, de a cómo, cuándo y por dónde alguien le ha hecho el amor a la mayoría de esas chavas. La que no ha pasado por alguno de los foristas, ha pasado por otro, así que siempre hay algo dicho o por decir de cada mangazo que allí se anuncia. De lo que había poco, cuando comencé a escribir, era del punto de vista femenino.
Entre más leía, más me daba cuenta de que sí lo que el respetable público quería eran pretextos para sacudirle el pescuezo al avestruz, yo tenía muchas historias que sin duda podían animarles los instintos.
En esas fechas venía regresando de un corto retiro. Acababa de pasar por un trabajito de hojalatería y pintura en el que, entre otras cosas, me hice vulcanizar las búbis a 30 libras. Con mi flamante pechonalidad y nuevas fotos estaba trabajando, bajo el seudónimo de Zoë, cuando empecé a escribir en el foro.
Comencé por contar la historia de cómo me hice escort, de la primera vez que hice el amor y muchas otras en las que, como aquí, el sexo era el principal ingrediente. De inmediato llamé la atención y comenzó a haber gente que quería acostarse conmigo. Así empecé a trabajar usando el nombre que me pusieron en la pila bautismal: Fernanda.
Todos los días distribuía mi tiempo en cuatro cosas. Llevar una vida lo más normal posible; hacer ejercicio para mantener el cuerpo sano, durito y sabrosón; trabajar de cama en cama; y escribir historias chocarreras en los foros de internet.
Poco a poco comencé a cambiar mi concepto de los foristas. Lo que en un principio fue una forma de hacerme publicidad se fue convirtiendo en medio para hacer amigos.
Entre aquellos que yo imaginaba como grandes chaqueteros y clientes potenciales, fui encontrando seres humanos maravillosos. En un lugar que conozco como el foro de SexyMX, conocí a gente, con los apodos más raros del mundo, pero a la que hoy cuento como grandes amigos. Kokosh, Rafa, Player, Rasta, Franbar, Yarko, Kaos, Break, Marlboro, Luci, Yomero, RoadKing, Angeluz, Ayax, Buenazo, Buyogui, Camus, Cardozo, C-carlos, Changoleon, Killer, Chicharrin, Constantine, CPMario, Cráneo Rojo, Cursor, Eduarck, Epic, Estoqueera69, Excalibur, Forsex, Falco, Franmero, Gallo, Guardián, Hammer, Impaler, Jinete Nocturno, Joey, JoeBlack Lovecraft, Matt, Orgon, Osobanda, Panzer, Pastor, Patasaladita, Pistol, Regioboy, Rigo, Rodin, Rubi, Tyson, Yarko, Yayo, por sólo nombrar a algunos.
Con unos he compartido cama y arrumacos, con otros sólo sonrisas y desveladas, pero con todos tengo historias que contar. Ya son dos años desde que descubrí los foros. En uno casi dejé de participar. El otro -el de sexy- sigue siendo mi casita. Con sus días buenos y sus días malos, tengo que reconocer que en esos foros comenzó a escribirse esta columna.
Besos de forista
Fernanda, siempre
Publicado en el Periódico Metro el 15 de julio de 2008